En el ámbito de la enfermería es clave un manual gestado en la Casa de Salud Valdecilla. Se trata de Manual de la enfermera, con primera edición de 1934, firmado por el Dr. Manuel Usandizaga, aunque contó con la colaboración de distintos Jefes de Servicio de la Casa de Salud Valdecilla, entre ellos el Dr. Heliodoro Téllez Plasencia, radiólogo.
Antes de nada, se ha de recordar que la Escuela de Enfermería primero fue Escuela de Enfermeras. Es necesario remarcarlo porque no es cierto que la Escuela de Enfermería sea la única entidad del entorno Valdecilla que haya conservado su nombre original; no, también la Escuela de Enfermería cambió su nombre, al igual que la Biblioteca Marquesa de Pelayo, en origen Biblioteca de la Casa de Salud Valdecilla, o la propia Casa de Salud Valdecilla, actual Hospital Universitario Marqués de Valdecilla. Nada que sorprenda, teniendo en cuenta que la institución tiene más de ochenta años cumplidos.
La Escuela de Enfermería se fundó de acuerdo con el modelo Nightingale, en cuya descripción no nos vamos a detener. Baste decir, por lo que ahora interesa, que era un modelo laico. El director de la Escuela era el Dr. Usandizaga y su subdirectora la Dra. Teresa Junquera, una figura de la medicina española a recuperar. Cabe pensar que el primero fue nombrado a sugerencia de la Marquesa de Pelayo y la segunda por el Dr. López Albo.
En agosto de 1930, a escasos meses, pues, de la inauguración de la Casa de Salud Valdecilla, la marquesa impone a Sor Bastos al frente de la institución aduciendo el mal funcionamiento de la Escuela de Enfermeras. Consecuencia de este cambio de rumbo es la dimisión del Gerente y su equipo, incluida la Dra. Teresa Junquera; el Dr. Manuel Usandizaga conserva su cargo.
Realmente este golpe de timón de la marquesa fue ideológico. La Escuela de Enfermeras es probable que funcionara mal, pero de ser así, el principal motivo sería la falta de apoyo por parte del Patronato, controlado por la marquesa, y no otro.
La Escuela de Enfermeras se resiente. No será hasta el año 1934, con la publicación del Manual de la enfermera del Dr. Usandizaga, que no cuente con material de estudio propio.
La Biblioteca Marquesa de Pelayo conserva tres ediciones de este manual: la primera de 1934, la cuarta de 1943 y la octava de 1964.
La primera contiene un capítulo del Dr. Heliodoro Téllez Plasencia dedicado a fisioterapia. En las primeras ediciones de la posguerra este capítulo se mantiene pero sin el nombre del autor. En ediciones posteriores el capítulo desaparece por completo.
La Biblioteca también conserva un cuadernillo del Dr. Heliodoro Téllez Plasencia, cuadernillo que es precisamente su capítulo censurado en el Manual de la enfermera. Es ejemplar único.
Del Dr. Heliodoro Téllez Plasencia es muy poco lo que sabemos. Apenas que siendo profesor de Terapéutica Física en la Universidad de Barcelona es invitado a dirigir el Servicio de Fisioterapia y Radiología de la Casa de Salud Valdecilla, invitación que acepta. En 1937 se ve obligado a pasar a Francia y de aquí a Barcelona. Con la caída de esta ciudad regresa a Francia. Sabemos que estuvo vinculado con el Instituto Curie de París. No sabemos exactamente cuándo ni dónde fallece. Su última publicación conocida, un capítulo en el Manuel de Photographie Scientifique, es de 1956. El Aula Magna del pabellón 16 lleva su nombre en su honor.
En la exposición hemos incluido el ejemplar de 1934 y otro de la posguerra junto al cuadernillo del capítulo censurado en la vitrina dedicada al impacto de la Guerra Civil en la producción editorial de la Edad de Plata de las Ciencias Españolas.